“Sólo quiero hacer buenos ciudadanos. Si un niño escucha buena música desde el día de su nacimiento, y aprende a tocarla, desarrolla sensibilidad, disciplina y resistencia. Su corazón será noble.”
Shinichi Suzuki en Educados con Amor
Iniciación a una edad temprana
Se recomienda comenzar entre los 3 y 5 años, pues a esta edad los niños son neurológicamente más receptivos al aprendizaje auditivo, tienen gran entusiasmo por aprender y congeniar con sus padres y les gusta imitar a los mayores. Además, tienen el tiempo adecuado para desarrollar una nueva habilidad y es una excelente edad para que establezcan patrones de estudio. En cualquier caso, no hay límite de edad para comenzar y niños de más edad y adultos disfrutan y avanzan en el aprendizaje del instrumento con este método.
Escucha y repetición
Los niños aprenden a decir sus primeras palabras después de haber escuchado cientos de veces las mismas palabras, y hasta que las puedan utilizar correctamente deben decirlas mucho y en muchos contextos. De forma análoga, la base del aprendizaje Suzuki de un instrumento es la escucha repetida de las piezas a estudiar, complementado con el contacto habitual con la música clásica. La escucha de las piezas en grabaciones y en conciertos de sus compañeros alimenta en los niños las motivación de aprenderlas y tocarlas. En paralelo, este desarrollo auditivo incrementa la capacidad de memorización y activa su sensibilidad al estilo y la interpretación musical..
Motivación
Cuando un niño dice sus primeras palabras todo su entorno se las aplaude, se las repite y le anima a que continúe intentándolo. El aprendizaje musical Suzuki está igualmente basado en un ambiente de refuerzo positivo, amor y reconocimiento de los logros.
Repertorio acumulativo
Una vez que el niño ha asimilado una pieza no se deja de lado, más bien al contrario, se revisará para mejorar la técnica. Con cada pieza nueva los alumnos utilizan los conocimientos que han ido adquiriendo y los complementan con nuevos elementos técnicos e interpretativos.
Práctica diaria
La práctica diaria se traduce en un progreso continuo. Al igual que en el habla cada palabra será más fácil de pronunciar y las palabras darán paso a las frases, en la música cada nota será más fácil de tocar y las notas darán paso a las canciones.
Aprender de oído
En el lenguaje hablado los niños aprenden a leer después de saber escuchar y hablar. De la misma manera, en el método Suzuki esperamos a enseñar Lenguaje Musical cuando el niño haya desarrollado su habilidad para escuchar y reproducir los sonidos musicales de forma natural.
Calidad de sonido
La búsqueda de un sonido bello es esencial en la enseñanza Suzuki y comienza desde las primeras clases de instrumento. La técnica del instrumento tiene como objetivos la belleza del sonido y la expresión musical plena.
Clases individuales y de grupo
Ambas son importantes y se complementan para equilibrar las necesidades y el disfrute de hacer música. En la clase individual trabajamos al ritmo de aprendizaje de cada alumno, y en ella estarán presentes al menos su padre o su madre. En la clase de grupo los niños tienen el placer de tocar juntos. Los alumnos más jóvenes escuchan las piezas de los estudiantes mayores y se sienten animados a esforzarse para poder tocar estas piezas. En el método Suzuki, participar en el aspecto social de la música desde el comienzo del aprendizaje musical es un elemento clave.
Enlaces interesantes
Federación Española del Método Suzuki
Asociación Europea del Método Suzuki
El objetivo del Dr. Suzuki no es hacer meros instrumentistas, sino desarrollar en los niños la sensibilidad y la capacidad para poder tocar y disfrutar de la música con la seguridad de que esto hará que sean mejores personas.
